Skip to main content
María Angelica Latorre
Andrés Neira [1]

La crisis del COVID-19 ha dejado claro que estamos en serios problemas. Este evento alteró nuestra rutina y ha generado cambios permanentes. El aislamiento, los sucesivos encierros y las pérdidas de los miembros de la familia se encuentran entre los eventos traumáticos que remodelan el mundo conocido.

Los cambios son continuos e inevitables; los cambios son parte de la evolución de cualquier sistema. Un año después, mientras reflexionamos sobre esos cambios, vemos la capacidad del ser humano para readaptarse a la nueva normalidad. Cada amenaza a la existencia abre las puertas hacia un proceso de aprendizaje: un proceso de aprendizaje de supervivencia.

Estimado lector, cierre los ojos e imagine que puede viajar en el tiempo para encontrarse a sí mismo hace un año. Ahora, hable con su yo alternativo sobre todos los eventos que han ocurrido: el encierro ha durado más de un año y no tres meses; Space X nos está dando la oportunidad de ir al espacio exterior; la comunidad científica desarrolló una vacuna en un tiempo récord para acabar con la pandemia. Este ejercicio le da un ejemplo de nuestra capacidad de adaptación y demuestra cómo podemos ser catalizadores para crear o destruir. Sin embargo, es en nuestras habilidades creativas donde reside la esperanza de rediseñar este presente.

El poder de conectar propósitos comunes

Hace un año iniciamos el Executive Master in Change en INSEAD. Un programa dirigido a desarrollar las habilidades para ser agentes de cambio dentro de las organizaciones. Es un programa que va más allá del formato de una escuela de negocios clásica porque se enfoca en explorar la esencia humana para conectar con los procesos de transformación.

En nuestras conversaciones iniciales, compartimos nuestras profundas preocupaciones sobre nuestro país, Colombia. Nuestro punto de conexión es el deseo de dejar de ser espectadores. Después de tantos años en el mundo empresarial, volver a la academia nos permite adentrarnos en un espacio creativo y conectarnos con recursos que de otra manera sería poco probable que tuviéramos a nuestra disposición.

Ambos venimos de mundos corporativos y nos hemos dado cuenta de que podemos contribuir de múltiples formas para impulsar el cambio desde el área de especialización de cada uno. La clave es ser consciente de la necesidad de transformar y conectar los recursos con las personas para impulsar la transformación. Así nació este proyecto que llamamos «impACTivist».

El poder de la «transformación consciente»

Toda crisis trae cambios; todo depende de dónde los observemos: Como una oportunidad o una pérdida. Todos los días escuchamos la frase exacta repetidamente: «Es una crisis sin precedentes». ¿Pero lo es realmente?

Como oportunidad, podemos decir que esta crisis puso de manifiesto la profunda desigualdad social y el estado de nuestro planeta. Pero también ha demostrado cómo las personas como usted y nosotros podemos actuar y si todos actuamos rápidamente, podemos revertir la tendencia y crear el impacto que necesitamos. Solo necesitamos imaginación moral.

El primer paso que puede tomar es reconocer que el sistema no está funcionando y el segundo es averiguar cómo puede contribuir. No podemos seguir delegando la responsabilidad del cambio en las instituciones. Hoy más que nunca, es fundamental demostrar nuestra responsabilidad cívica a partir de la transformación de nuestro metro cuadrado. Todos, sin excepción, tenemos un papel fundamental dentro de nuestra comunidad. No permitamos que la «nueva normalidad» nos empuje a una «nueva zona de confort».

La agenda global de los «Objetivos de Desarrollo Sostenible [2]»

The good news is that we are not alone and hence the power to connect. The COVID-19 showed us we have the same essence: hopes and fears. The only way to overcome the crisis is through solidarity. A better present requires solidarity between us and our connection in harmony with the planet.

The path is already outlined within the Sustainable Development Goals (SDG) agenda of the United Nations (UN). The SDGs «is a set of global goals to eradicate poverty, protect the planet and ensure prosperity for all as part of a new sustainable development agenda.» The goal is to achieve these objectives by 2030. Five years have passed since their publication, and we have just a decade left to meet them.

The 17 goals or the Global Goals are:

Sustainable Development Goals

Es una agenda ambiciosa y es muy probable que la crisis actual retrase el cumplimiento de los objetivos. Uno de los puntos clave es que la sostenibilidad debe dejar de ser el tema candente para convertirse en parte de la «nueva normalidad».

Ahora, ¿qué sigue? ¿Te has preguntado alguna vez cómo puedes contribuir al cambio? ¿Quién lo dirige? ¿Cómo podemos salir de todo este caos? ¿Quieres marcar la diferencia y no sabes cómo? Estas son las preguntas que nos hacemos y por eso hemos abierto este espacio de reflexión. El objetivo es construir a partir del intercambio de ideas y así poder generar los puentes que nos permitan conectar un propósito común.

El futuro es ahora; ¡Es hora de rediseñar nuestro presente!

¡Bienvenido a impACTivist!

1- María Angélica Latorre y Andrés Neira son estudiantes del Executive Master in Change at INSEAD.

2- United Nations, “Sustainable Development Goals”

¿Te gustó este artículo? Suscríbete y te informaremos cuando sean los próximos.